Capitulo 5

 

Pepe está jugando a pelota con sus amigos, ésta sale fuera del campo y es Pepe es quien va a buscarla. La pelota cae a los pies de Rosario. Pepe se disculpa muy caballeroso y recoge la pelota. La niña no dice nada pero siente algo que le gusta. Pepe se va sin hacerle caso pero la niña le mira el cuerpecito muy animada. Sus amigas le dicen divertidas: 

--¡que guapo es, que guapo es¡¡¿no te gustaría que fuera tu novio? 

--¿¡que cosas dices?¡¡Ni me ha mirado...¡ 

Pero la verdad es que el corazón de la niña está empezando a latir por ese chico. Ángel y Kiko le advierten a Pepe que hay una niña que no le saca los ojos de encima. Aunque aún Pepe no ha sentido el llamado de las hembras se gira y sonríe a Rosario que siente que le da un infarto. 

--¡le gustaste, le gustaste¡¡¡que suerte, que suerte¡ --dice las chicas. 

Rosario no dice nada pero se queda ruborizada. La verdad es que le gusta lo que está sintiendo. La niña no se da cuenta que desde un coche Fernando la está mirando con cara de degenerado: 

--esto si que no me gusta nada... ese bombón me lo tengo que comer yo. Esa niña a mi nunca me miró como a ese imbécil. Tengo que hacer algo, esa niña tiene que ser para mi, sólo para mi. Yo quería hacer las cosas bien pero tú me has obligado a hacerla de otra manera... 

Fernando saca una botella que tiene en la guantera y bebe. Sonríe con cara de pervertido por lo que se le ha ocurrido. Mira fijamente a la niña y le dice sonriendo con cara de pervertido: 

--pronto vas a saber lo que es un hombre y te va a gustar mucho. 

Fátima entra en el cuarto de su hijo que la abre sofocado, estaba encerrado pensando en Pepe. Aún tiene los pantalones desabrochados. Le falta un calcetín que está tirado en el suelo y  de una patada lo mete debajo de la cama para que su madre no sospeche lo  que hacía.

--¿por qué no me abrías?¿qué te pasa que ahora te la pasas encerrado en tu cuarto? Antes siempre dejabas la puerta abierta. ¿se puede saber qué es lo que haces? 

José Fernando se siente descubierto, no quiere que su madre se dé cuenta de lo que le gusta Pepe y los hombres en general y menos lo que hace pensando en el cuerpo de Pepe en bañador y se pone a gritar para que su madre no le pregunte más. 

--¡a ti que te importa¡ 

José Fernando se va dejando a su madre muy angustiada: 

--¡se puede saber lo que pasa? a mi no me faltas el respecto¡ 

El chico se va y Fátima lo va siguiendo gritando hasta que doña Antonia se pone en medio de ellos dos y José Fernando se aleja de su madre. 

--¡no te vayas, hijo¡¡tenemos que hablar¡ --Fátima. 

La anciana no le permite que se vaya. 

--¡¡tú a mi nieto no le gritas de esa manera¡ 

--mire señora, no se mete en como yo educo a mi hijo. 

--¡sí me meto porque esta es mi casa¡ 

Fátima quiere pasar a la fuerza pero la anciana la abofetea con desprecio y le dice: 

--¡tú no eres nadie, en esta casa sólo mando yo y soy yo la que decide la que se hace aquí¡ 

Fátima, harta de que todos la falten al respecto se encierra en su cuarto a llorar amargamente. 

Don Pepe se está dando una ducha y mientras se ducha piensa en la desconocida que tanto le gusta. Sonríe con ternura. Se siente como un adolescente. La cara se le ilumina pensando en ella. 

--¿quién debe ser esa mujer? La volveré a ver? 

A pesar de ser casada no puede dejar de pensar en ella y le gusta lo que siente. Luego se angustia pensando que no la volverá a ver. Golpea la pared con la cabeza y dice: 

--¿y si no la vuelvo a ver? 

Él mismo se recrimina sus sentimientos: 

--me estoy comportando como un adolescente, ella está casada, ¿de qué me sirve a mi? Me ilusioné solo, me ilusioné como un adolescente. Juré a mi esposa que no me volvería a enamorar y no me puedo comportar como un adolescente, tengo un hijo. Pepe es lo más importante de mi vida y no debo pensar en nada más.

Pepe se pasa las manos por la cabeza, el agua fría lo relaja pero no puede evitar tener una sensación de derrota por el hecho de que la primera mujer en la que se fija que no sea su esposa ya está casada. 

Fátima ha pasado toda la tarde en su cuarto a oscuras. Fernando entra a gritos y le enciende la luz. Ella lo mira con muy mala cara, con cara de haber estado sufriendo. Él con desprecio le dice: 

--¿¿tú que crees que eres una marquesa?¡ ¡esta no es tu casa y no puedes estar toda la tarde de vaga, levántate ahora mismo de la cama¡ 

El hombre agarra a su esposa del brazo para que salga de la cama. 

--por favor, me duele la cabeza --le suplica. 

--¡pues será de no hacer nada¡¡ 

--por favor, que no me grites de esa manera... 

--¡yo te grito como quiero. Mamá me dijo que le gritabas a mi hijo¡¡¡tú no eres nadie para gritar a mi hijo¡ 

--Pero es que me faltaba al respeto.

--¿y quien te va a respetar a ti?¡¡ 

Fernando la mira amenazante y le dice: 

--¡tú no tienes derechos en mi casa así que te muerdes la boca antes de gritarle a mi hijo¡ 

La mujer rompe a llorar y dice a su marido: 

--¿por qué me tratas así?¿qué te he hecho yo para que me desprecies de esta manera? 

--¡¡y tú no sabes más que llorar y meterte en la cama de los hombres¡¡ 

Fátima no se puede defender ya que Fernando le vuelve a apagar la luz y se va. Abre la puerta un momento y le dice a gritos: 

--¡y levanta el culo para preparar la cena¡ 

Luego cierra dejando destrozada a Fátima. 

Don Pepe ha preparado unos bocadillos para la cena. Pepe lo come con hambre. 

--debes estar cansado de comer puras porquerías..

--no te preocupes, el bocadillo está muy bueno dice con la boca llena. 

El hombre le sonríe con ternura y le dice: 

--no hables con la boca llena..

Hay una gran relación entre padre e hijo. 

--por suerte gracias a las madres de tus amigos comes caliente algunos días. A ver si algún día las conozco.

Pepe no dice nada y no deja de comer. 

--¿y no te gustaría tener en casa una mujer que se encargue de tus cosas? Como todos tus amigos --le dice con cierto miedo. 

--¿quieres decir una criada? Ya tenemos una que viene a hacer la limpieza, creí que no le podías pagar más horas..

--no, no me refiero a eso, me refiero a una mujer. Todo hombre necesita una mujer... 

Don Pepe habla muy nervioso, está pensando en Fátima y aunque sabe que está casada le gustaría saber qué opinaría su hijo de que tuviera una relación como esa. Pepe ya se da cuenta de lo que le está diciendo su padre. Deja de comer lo que ya no es buena señal y mira a su padre molesto: 

--¡tienes novia?¡¡estás traicionando a mamá?¡¡ 

--No, no es nada de eso.

Pepe está muy dolido: 

--¡me dijiste que jamás traerías otra mamá¡¡no quiero que la olvides¡ 

--¡cálmate hijo, cálmate¡ 

Pepe mira a su padre llorando: 

--¡yo no quiero que olvides a mamá, no quiero que tengas novia¡ 

--¡no, no yo nunca olvidaré a tu madre, no tengo novia¡ 

--¿y entonces porque me dijiste eso? 

Muy nervioso don Pepe le dice: 

--¡nada más fue por darte charla¡ 

--¡¡júrame que nunca vas a traer una mujer a esta casa,  tú y yo solo ya estamos bien¡ 

Triste porque no deja de pensar en Fátima, don Pepe le dice: 

--te lo juro.

Pepe le sonríe y sigue cenando. Don Pepe se queda preocupado, no deja de pensar en Fátima. 

Los días pasan rápidamente y la familia Morales se prepara para regresar a casa. Fernando última los detalles para acostarse con Rosario, José Fernando está triste porque dejará de ver a Pepe pero feliz porque vuelve a la piscina. Le encanta despedirse del cuerpo que tanto le gusta. Fátima está en el mercado. 

--por favor, un queso manchego pero que no sea García-baquero 

--¡¡por supuesto... claro... ya verá como le gustará este, es mucho mejor¡ 

La esposa de Fernando sale muy cargada. Desde un coche la ve don Pepe. El corazón del hombre late fuertemente. 

--es ella, es ella --se dice lusionado. 

Sale muy deprisa y se acerca a la mujer. La aborda y Fátima se asusta. 

--¡no, no se asuste... soy yo¡ --dice con su mujer sonrisa. 

--¡¡Usted otra vez?¡¡¡pero hasta cuando me va a dejar en paz¡ 

Fátima se quiere adelantar pero Pepe se pone ante ella. 

--Deja que yo la ayude dice tratando de sacarle las bolsas. 

--¡no, no... por favor no¡ 

él insiste: 

--su marido no debería permitir que usted cargara tanto peso... 

--¡vivo cerca, no me moleste¡ 

--aún así.

Doña Antonia ve como Pepe agarra de la mano a Fátima para sacarle las bolsas. Se acerca con una rapidez sorprendente en su edad y abofeteando a Fátima le dice: 

--¡¿¿qué haces con otro hombre¡¡¡tú marido y todo el mundo se va a enterrar que eres una perdida¡ 

Fátima se pone a llorar. 

--oiga señora, no estamos haciendo nada malo --Pepe sorprendido. 

--¡no, si ya sé que la culpa es de ella, usted solo recoge lo que esa ramera le ofrece¡ 

Doña Antonia no deja que ninguno de los dos se explique. Empuja a Fátima de muy mala manera y dice: 

--¡¡anda, para casa, perdida. Ya verás cuando se entere su marido¡ 

Fátima no dice nada. Pepe no se atreve a hacer nada y se queda muy preocupado.  

http://www.quesosmanchegos.com

https://www.garciabaquero.com/nuestros-quesos

Los Garcia Baquero son los quesos manchegos más populares en España. Son  del mismo Alcázar de San Juan pero no son populares en el pueblo. La gente prefiere otros.