sábado, 3 de julio de 2021

Capitulo 31



Sandra llega en el hotel y le muestra a José Fernando unas fotos con las que nadie dudará que él y Rosario pasaron la noche juntos.

--aquí las tienes, yo cumplí mi parte del trato.

José Fernando se ruboriza un poco al verse desnudo en brazos de una mujer y espera que esas fotos nunca tengan que salir a la luz. Con ironía Sandra dice:

--esto parece vocacional. Es la segunda vez que te dejas fotografiar desnudo ¿no te gustaría ser modelo desnudo?

--¡¡no vengas con tus tonterías, que yo sé porque lo hago¡¡

--sí, s --dice con cierto desprecio—aunque no sé cómo te vas a ganar el amor de ese chico enemistándote con él.

--yo no aspiro a su amor ya que sé que nunca lo lograré, simplemente no me da la gana que no seas feliz.

Sandra se lo queda mirando sonriendo:

--es una pena que sea mujer, tan bonita –piensa—e igual a su padre. Si fuera hombre hasta podría ser su esposa pero bueno, gracias a este mariquita lograré todo lo que merezco.

José Fernando sigue hablando:

--la cosa es que Rosario se aleje de él al creer que nos acostamos.

--no te hagas muchas esperanzas. Es una cualquiera, pero esperemos que tenga dignidad y por un lado y por otro se aleje de Pepe.

--si es necesario sí le enseño yo mismo a Pepe estas fotos haré lo que sea con tal que no se casen.

Sandra se sienta en el sofá.

--¿me pones una copa?

--no sé si hay

--¡¡claro que sí, en la nevera hay de todo. Dame algo¡¡

Mientras el hombre le sirve ella dice:

--¿Sabes que se accidentó el sobrino de esa zorra?

Con el rostro de Carmelo clavado en la mente, José Fernando dice:

--¡¡¡¡no puede ser¡¡¿cómo está?

José Fernando siente angustia.

--parece que muy grave. 

José Fernando está muy impactado:

--¡¡quiero ir al hospital¡¡¡

--muy buena idea. Así la atormentas más.

José Fernando no piensa en Rosario. Está angustiado.

--no sé… ¡ese chico¡¡

Sandra lo mira con ironía:

--¿no me digas que te gusta?

--¡¡claro que no¡¡¡¡¡¿¿cómo se te ocurre??¡¡

--¿y entonces que es lo que te pasa con ese muchacho?

--me recuerda mucho a mi padre.

--¿de veras?

--te lo juro. Es igual a él.

Sandra se queda pensando, recuerda que el día en el que mató al padre del chico fue porque descubrió su romance con la hermana de Rosario:

--claro, no es nada raro… es tu hermano.

Esa idea no dejaba de darle vueltas.

--¡¡¡si pero cómo¡¡?

--¡¡tu padre y la hermana de Rosario eran amantes¡¡¡

Con los años José Fernando ha olvidado olvidando la realidad que vivió, que vio entre sus padres. La muerte de ambos ha borrado esa realidad. No hay muerto malo.

--¡¡no es verdad. Mi padre era un buen hombre, jamás le faltaría a mi madre¡¡¡

Con una sonrisita Sandra dice para sí:

--bondadoso como tú.

Como que quiere tener al chico de su lado le dice:

--me consta que era un hombre muy bueno y honesto. Tú conoces a Rosario pues imagina cómo fue la hermana que es quien la crió. Esa tipa lo sonsacó, se obsesionó con él y tu padre era muy noble pero era macho y le dio todo lo que buscaba.

--¿y tú como sabes?

--porque tu padre era como un padre para mi y él se sintió tan culpable  se sintió violado por esa mala mujer. Lloró en mis hombros..

José Fernando no se da cuenta que la mujer se está burlando de él. Sufre por el supuesto drama de su padre y más que nunca odia a Rosario:

--¡¡¡juro que me voy a cobrar en esa tipa, voy a cobrar todo el daño que la zorra de su hermana le hizo a mi padre y todo el daño que esa me hace a mi robándome a mi Pepe¡¡¡

Sandra sonríe con una falsa amistad:

---yo siempre voy a estar a tu lado,  como si fuera tu hermana. Es lo que tu padre hubiera querido.

A pesar de toda la rabia que siente, hay algo bueno en todo esto:

--un hermano. tengo un hermano.

Está emocionado:

--siempre quise tener un hermano. No me hubiera sentido tan solo, tengo que ir al hospital. Tengo que verlo.

--ya me contarás, yo tengo que luchar por lo mío.





Rosario deambula por las calles del pueblo sin saber donde ir. Le atormenta el rechazo de su hijo que se debate entre la vida y la muerte pero ella no lo sabe. Le atormenta lo que ha pasado en la boda con su amado y que no sabe que es mentira. Le atormenta creer que ha hecho el amor con José Fernando y no sabe que es un invento. Siente que el mundo se le cae encima. Se sienta en un banco y llora amargamente. Pepe la ha estado buscando como loco. Suspira al ver a su amada aunque le duele verla sufrir. Le pone una mano en los hombros:

--Rosario, mi amor, tenemos que hablar.

Ella se sobresalta al sentir una mano y luego al darse cuenta que es él siente muchas cosas. Rechazo, alegría, vergüenza, rencor. Pepe la mira con desesperación

--no sabes cuanto siento lo que pasó en la boda, yo te juro que no sé cómo pasó pero tú eres la única mujer que me importa y aunque esa niña sea mi hija.

Rosario no le deja continuar. Lo abofetea, una vez y otra, y otra y otra y otra más. Así unas cuantas veces más. Pepe deja que se desahogue. Aguanta los golpes sin moverse, con los ojos llorosos. Finalmente Rosario lo abraza llorando. El llanto de ella le rompe el corazón a él que no soporta verla sufrir.

--¿¿¡¡porque me has hecho esto?¡¡¡¡¡Yo confiaba en ti, yo creí en tu amor, pensé que por fin se había acabado la desgracia y que al fin íbamos a ser felices.

--Y aún podemos ser felices¡¡¡ Mi amor,  yo te amo, como tú a mi. Yo no recuerdo lo que pasó con Sandra pero lo que si está claro es que fue en la época en la que tú me dejaste... bebía para olvidarte.

Rosario está muy atormentada, quiere separarse del hombre pero éste se ha aferrado a ella y no le permite escapar de sus brazos.

--¡¡¡suéltame o es que me vas a decir que la culpa es mía¡¡¡

Pepe la mira muy triste:

--¡¡no es eso pero si me amas te suplico que me aceptes con mi pasado como yo te acepto con el tuyo¡¡

Rosario ve tanto amor en los ojos de él que no puede rechazar sus labios y cuando él se prepara para besarla y los enamorados se funden en un tierno aunque con gusto a lágrimas beso de amor.


En casa de Pepe, María Belén está mirando fijamente una foto. No sabe porque pero le despierta mucha ternura lo que ve. Se acerca a Pepe con esa foto.

--señor, señor.

Pepe se acerca a ella y con cariño le dice:

--señor no,  dime abuelo.

--¿quien es esta señora, abuelo? ¿Mi abuelita?

Pepe tiembla al ver que la niña tiene una foto de Fátima en sus manos. Una foto que él guarda como el mayor de sus tesoros.







José Fernando llega al hospital. Antonia ha pasado sola la peor noche de su vida sentada en una de las sillas de la sala de espera. Él se acerca a ella:

--hola... ¿me recuerdas?

--sí, nos vimos en la boda --dice triste.

--Me enteré de lo que pasó... del accidente de ese chico que iba contigo ¿es tu novio?

Antonia se horroriza, siente que se le nota en la cara y cree que es algo muy malo porque está convencida que el accidente del muchacho es un castigo de Dios por sus pecados.

--¿¿¡¡como se le ocurre?¡¡¡

--Perdón... yo es que no sé...

Aunque le duele decirlo, Antonia dice:

--soy su hermana... Carmelo es mi hermano gemelo.

Esta noticia impacta mucho al hombre:

--¿Carmelo es tu hermano gemelo.?

Ella hace que sí con la cabeza:

--¿dos hermanos? --piensa aturdido.

Aunque no sabe porque, no siente ningún interés por la única sobrina de Rosario.

--¿y usted quién es? --pregunta la joven que está muy triste.

--mi padre era muy amigo del tuyo,  os quiero ayudar.

Al ver a Antonia acompañada por fin por un adulto, el doctor se acerca a ellos.

--por fin... ¿usted es de la familia?

--sí, soy su hermano --dice José Fernando con seguridad.

A Antonia no se le hace raro, cree que está mintiendo para ayudarla.

--¿cómo está mi hermano? --dice José Fernando.

Antonia se muere de la angustia, la cara del médico no hace presagiar nada bueno.


Por otro lado, Sandra llega a casa de Pepe, tiene sus propias llaves, se muere de rabia al ver a María Belén con una foto de su verdadera madre, Pepe padre está muy emocionado.

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Final

  Rosario y Pepe están conmocionados mientras que la policía se llevan los cuerpos de José Fernando y Lucas. En cierta manera, Pepe se sient...